Panamá y Costa Rica proponen incluir a todas las especies de ranas de cristal en el Apéndice II de CITES

La presentación de esta propuesta de especies número 34, se llevó a cabo en la Reunión Cumbre de las Partes (COP19) de la CITES, que se celebra en la ciudad de Panamá, donde asistieron representantes de los países partes de la CITES, de la Sociedad Civil, Ongs, y la comunidad científica.

Las ranas de cristal tienen una alta demanda en el mercado internacional de mascotas debido a su piel transparente y tamaño diminuto. Estas características hacen que estas especies sean codiciadas por coleccionistas privados, vendedores y criaderos en todo el mundo.

Casi el 50% de las especies de rana cristal evaluadas por la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) están amenazadas de extinción. Estas en su mayoría son afectadas por la pérdida de hábitat, el cambio climático, enfermedades infecciones emergentes y el comercio de mascotas exóticas.

Shirley Ramírez Carvajal, bióloga y encargada de la Estrategia Nacional de Biodiversidad del MINAE de Costa Rica, dijo que “estamos muy preocupados por el tema del tráfico que se está dando a nivel internacional principalmente para Europa tenemos un serio problema con la venta de nuestras especies en el mercado, es por eso que esta propuesta será sometida a votación para que los países partes de la CITES, puedan apoyarnos a regular el comercio de este anfibio que está en extinción.

De acuerdo con la bióloga Ramírez Carvajal, los precios de estas ranas de cristal oscilan dependiendo de las especies, entre más endémica o raras es más cara por ejemplo se han tenido datos que un solo individuo puede ser vendido en unos 950 euros.

Por su parte Diana Laguna, viceministra de Ambiente de Panamá, manifestó que como país “estamos comprometidos totalmente con esa propuesta porque somos conocedores del peligro crítico de extinción que se encuentran los anfibios en el mundo, según estudios científicos de la UICN los anfibios son los animales en primera línea en peligro de extinción y después vienen los tiburones, en Panamá también tenemos problemáticas serias con los anfibios y podemos hablar específicamente de la rana dorada que es la que más conocemos, y que ya casi se está extinguiendo”.

La viceministra Laguna destacó que Costa Rica es el país donde más tráfico se ha encontrado de ese tipo de rana cristal, hay delincuentes ambientales que se le han capturado hasta 700 ranas en un solo equipaje, es por eso que entonces el objetivo es detener el avance de ese tráfico ilegal de las especies, para poder conservarla y garantizar su sostenibilidad, argumentó.

Además de Panamá, entre los países coproponentes de esta propuesta están: Argentina, Brasil, Costa de Marfil, Estados Unidos, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Gabón, Guinea, Nigeria, Perú y Togo.