El nuevo líder del oficialismo sustituye al multimillonario Bidzina Ivanashvili, fundador del partido, quien anunció el pasado lunes que abandonaba la política de manera definitiva.
"Vuelvo a la vida privada, a la que tenía antes de 2011, cuando me incorporé a la política", escribió el hombre más rico de Georgia aseguró que consideraba que ya había cumplido su misión.
Ivanishvili, junto con dejar Sueño Georgiano, anunció que donaba a fines benéficos la mayor parte de su fortuna, que él mismo estimó en 1.500 millones de dólares.
El nuevo presidente de Sueño Georgiano se desempeñaba hasta hoy como secretario ejecutivo del partido.
Para la oposición, el retiro de Ivanishvili no cambiará en nada la política de Sueño Georgiano y es una simple treta para continuar gobernando desde la sombra.
En las elecciones parlamentarias de octubre pasado, Sueño Georgiano obtuvo 90 de los 150 escaños que conforman el Legislativo, cuyas labores boicotea al principal fuerza opositora, el Movimiento Nacional Unido (MNU) fundado por el expresidente Mijaíl Saakashvili.
Los 36 diputados del bloque liderado por MNU renunciaron a su escaños por considerar que la elecciones fueron fraudulentas, pese a que fueron validadas por las misiones de observadores internacionales.
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