Argentina sale a conjurar a los inspirados serbios

Después de cumplir el principal objetivo que tenía en su portafolios, la selección argentina de baloncesto se apresta hoy a subir más arriba en el campeonato mundial de baloncesto, que se juega en China.
Los sudamericanos alcanzaron uno de los dos billetes reservados para América al baloncesto de los Juegos Olímpicos del próximo año en Tokio, Japón.

Con el pasaje olímpico seguro, Argentina quiere hoy vencer a la selección de Serbia, uno de los favoritos para llegar a la final.

Jugando muy bien

Con un equipo donde la altura de sus jugadores predomina, Serbia espera sacar del camino a los invictos argentino, que están jugando un gran torneo.

Bogdan Bogdanovic, con 20.8 puntos por partido, es la pieza fundamental en la estrategia del entrenador serbio Sasha Djordjevic, quien cuenta con Nikola Jokic, promediando 12 puntos por juego, Stefan Jovic, el mejor pasador del equipo, y Nemanja Bjelica, con 11.5 puntos por encuentro.

Pese a sus atributos, los serbios cayeron estrepitosamente ante España en un partido donde los estelares quedaron a deber, mientras que los peninsulares crecieron hasta ubicarse en una posición muy favorable para avanzar a semifinales, al enfrentarse a Polonia, a la postre fácil víctima de los argentinos en su último encuentro.

Con todo

El entrenador argentino Sergio Hernández se ha mostrado siempre confiado en la gran destreza de su equipo, liderado por un veterano medallista olímpico como Luis Scola, quien a sus 39 años de edad, mantiene la gran calidad en su juego.

Argentina mantiene jugadores de primer nivel en el bombardero Facundo Campazzo, Marcos Delia, Gabriel Deck, Nicolás Laprovittola y el joven Maximo Fjellerup, un plantel que se ha mostrado sólido hasta el momento.

España favorito

La selección española tiene al parecer un rival accesible en los cuartos de final, cuando enfrente hoy a Polonia, la gran revelación del torneo.

España ha venido de menos a más en el campeonato, y con sus dos últimas victorias sobre Italia y Serbia, ha confirmado que ha subido su nivel.

Por su parte los polacos, que regresaron al un mundial tras cinco décadas, tiene una misión complicada, después de mostrar sus carencias ante Argentina, que le arrolló sin atenuantes.